Translation

domingo, 14 de diciembre de 2008

San Marcos a las faldas del Cayambe

Nuevamente nos encontramos un domingo para conocer algo más de nuestro país. Una vez que se reunió el grupo empezó la aventura. Rumbo norte a una hora y media de camino nos esperaba Cayambe, la ciudad a los pies del volcán del mismo nombre, el cual queríamos visitar. En la ruta llegó el momento de familiarizarce con la gente que nos acompañaba. Un tic-tac fue el cómplice para compartir lo que hacemos y anécdotas de las excursiones. Después de un pequeño refrigerio para darnos fuerza, nos encontramos con una "piedrita" en el camino, bueno no era tan pequeña, una maquinaria que arreglaba el camino no permitió pasar y evitó que lleguemos a nuestro destino, no si antes provocar que el transporte se quede atascado. Fue necesario la ayuda de la comunidad y de la fuerza de nuestros compañeros, pero lo logramos y decidimos cambiar de ruta para conocer la hermosa Laguna de San Marcos en las faldas del Cayambe y su increible recorrido conocido como el "Trekking de los Pescadores". Asi que tomamos el camino que va por la parroquia Ayora un pueblito con calles estrechas y limpias, seguimos el lastrado y llegamos a Olmedo, que se extiende en un valle rodeado de montañas y haciendas donde la gente se dedica a la ganadería. Aquí realizamos nuestra última parada y continuamos por la vía hacia la reserva Cayambe – Coca. Varios kilómetros de naturaleza, por donde hace poco tiempo los chasquis entregaban los mensajes de los antiguos Incas, estabamos en tierra de cayambis. Hermosos paisajes acompañaban la jornada, montañas, puentes estrechos hasta que desembocamos en la misteriosa calma de una laguna de montaña.
La laguna de San Marcos es un lugar extraordinario ubicado a 3.400 metros sobre el nível del mar mide aproximadamente 6.000 m. La laguna de color azul oscuro, transparente nos recibía con su forma alargada y rodeada de
vegetación nativa y extensos pajonales, pero también con su clima frío, nos alistamos para bajar y disfrutar de la naturaleza. Primero un calentamiento que nos permitiría estar preparados para la caminata, unos ejercicios mas complicados que otros, la primera foto con el grupo completo y a caminar se ha dicho. El camino estaba al principio lleno de pajonales, gran variedad de flora nativa, insectos, la belleza detallada de flores diminutas, riachuelos de agua cristalina, musgo en su estado natural, en fin: era el escenario ideal para la fotografía.No falto los resbalones, las caídas, las hundidas de los zapatos en el lodo que al principio como que nos sorprendió pero luego lo olvidamos pues era mas emocionante disfrutar de la naturaleza y compartir sentimientos de confraternidad, hermandad, solidaridad y camaradería con nuestros compañeros.
Después de una larga caminata decidimos emprender el retorno, el cual fue menos complicado y más rápido, ya nos habíamos acostumbrado a los hermosos paisajes y al al camino al andar. Al
llegar cerca al campamento del ministerio del ambiente decidimos ir a conocer el río que pasaba cerca y es alimentado por la laguna además del puente que nuestro guía nos ofreció, pero no lo encontramos, aprovechamos el lugar para unir mas nuestros lazos de amistad y darnos un gran abrazo. Fue muy divertido. Y de regreso no podía faltar quedarnos en Cayambe, la ciudad de los famosos bizcochos, ideales para terminar el día, acompañados de un chocolate bien caliente y del no menos famoso, “queso de hoja”, ya mas abrigaditos regresamos a nuestra querida ciudad.